El TDAH es el trastorno psiquiátrico más frecuente en la edad escolar. Sus características principales son la inatención, hiperactividad e impulsividad. Tiene un origen fundamentalmente biológico, asociado a factores genéticos y ambientales que contribuyen a su aparición.
Es una alteración de la función ejecutiva que engloba; atender a estímulos, planificar y organizar una acción, reflexionar sobre las posibles consecuencias de las acciones…
El TDAH explica un alto porcentaje de los comportamientos disruptivos en la infancia así como de FRACASO ESCOLAR.
Por lo tanto es fundamental un adecuado diagnóstico y evaluación de la conducta persistente de inatención, hiperactividad e impulsividad de la población escolar, y que altera el rendimiento, el estado afectivo, la autoestima y el comportamiento del niño. La complejidad del diagnóstico radica en la sintomatología común con otras patologías psiquiátricas y médicas de las que es imprescindible hacer un diagnóstico diferencial para la eficacia de la intervención.
El tratamiento debe de incluir abordaje integral que incluye la psicoterapia individual con técnicas de modificación de conducta o cognitivas aconsejables. Intervenciones psicoeducativas a nivel familiar y escolar.
El tratamiento psicofarmacológico forma parte del plan inicial del tratamiento desde 1996, mejorando significativamente los síntomas y el pronóstico del niño. La necesidad de tratamiento psicofarmacológico debe de ser evaluado por un Psiquiatra cualificado.